Hace tiempo que no se habla de música en Ahora Te Jodes. Por eso hoy, jodidos lectores, después del largo letargo de ausencia musical, os traigo una gran noticia: La música vuelve a vuestro blog favorito; y que mejor manera de hacerlo, que comprometiéndome a traeros cada semana 5 canciones de la década de los 80 durante este mes.
Posiblemente no sean vuestros favoritos, ni los mejores, pero si recordáis cosas de los 80's seguro que os gustará. Por ello, os adelanto ya que las entradas no serán canción y descripción al lado del grupo en cuestión. Si hiciera eso posiblemente no leeriáis el post entero nunca. Así que esperaos un pequeño surtido anécdotas de la época. Datos que han pasado ya a ser lugares comunes en nuestra cultura, y que tienen alguna relación con el grupo o cantante en cuestión. Dicho esto, empecemos.
En 1984 un joven Ralp Macchio interpretaría el papel de Daniel Larusso en la película Karate Kid. Una película que caló hondo en muchos niños, y no tan niños, de la época. Años después un videojuego, del que hablé la semana pasada, arruinaría para siempre nuestra visión del "Dar cera, pulir cera". Fuera como fuere, la película entraría en nuestro imaginario cultural, y con ella, su BSO, de la que os traigo el hit You're the best de Joe Esposito. Escuchadla y rememorar la parte de la película.
Hace poco vi la película de Dolor y dinero, en inglés Pain and gain. El film es bastante entretenido si te gusta el género, y quieres ver a tres culturistas cagándola hasta más no poder por alcanzar "el sueño americano". Sin embargo, el título es un guiño a aquel eslogan de Jane Fonda que tan popular se hizo durante los 80s: "No pain, no gain", lo que traducido significa, "Sin dolor, no hay ganancia". Seguro que alguno de los que ha intentado ponerse en forma ha maldecido la jodida frase, especialmente, si eran como los actores que salían en el videoclip de la canción de Physical de Olivia Newton John. La chica parece que después de Grease quiso dedicarse a convertir en Travolta a algunos. Espero que lo disfrutéis.
Si hay algo muy ochentero es el radiocassette extraible. Al menos en España. Su curiosidad es que la virtud del jodido radiocassette era a la vez su defecto ¿Qué por qué? Simple, la gente se lo llevaba a todas partes. Con la excusa de "Es que si lo dejo en el coche, me lo roban" el aparatito les acompañaba hasta a cagar. Bromas a parte, lo peor de los radiocassettes, en general, es que decidan secuestrar a las cintas para siempre para hacer sonar la misma canción eternamente. No sé si veis Como conocí a vuestra madre, pero para los que la veis, seguro que os acordáis del episodio donde a uno de los personajes se le queda la cinta atrapada en las garras de ese malvado instrumento reproductor ¿Recordáis la canción? I'm Gonna Be (500 Miles) del grupo The Proclaimers es el tercer hit que os recomiendo esta semana. Seguro que muchos la reconocéis nada más escuchar el principio.
Cualquier individuo con una infancia bajo los influjos de la cultura de los 80's debe sonarle familiar el nombre de Bastian. Para los que no lo sepan, Bastian es el nombre del protagonista de la novela La historia interminable de Michael Ende. Seguramente muchos conozcáis el título más por la obra cinematográfica que por el libro. La cinta no agradó demasiado al autor. Decía que habían convertido su obra en una basura comercial demasiado cursi para su gusto. En cualquier caso que te guste más el libro o la película aquí es lo de menos, puesto que lo que interesa es su BSO. Más concretamente una canción de ésta: Never Ending Story de Limahl. Efectivamente, yo, como la mayoría de vosotros, recordaremos el film por algo más que el dragón pedarasta. La canción del cantante al que el vocalista de Elefantes, el grupo español, copiaría el peinado es posiblemente hoy un himno que nos recuerda que una vez fuimos pequeños.
Claro está que hoy no nos podríamos despedir sin hacer mención a uno de los más grandes del Rock, entre otros géneros que se atrevió a tocar. Algunos lo conocen como el rey y señor de todos los goblins, pues si en los 80's quedó algo claro en la cinta de Labyrinth es que era merecedor del título. Además cumplía años. 67 para ser más conceto. Hablamos del gran David Bowie, muy querido por uno de los fundadores de Necromaullido Films, productora amateur de la que hablaremos algún día, y a la que le deseo mucha suerte con el proyecto que están emprendiendo. Esta va por ti Iván LeChat, y por Bowie. Aquí os dejo con Magic Dance, y el fragmento de la película ;-)
La semana que viene más, y espero que mejor. Saludos jodidos de Balcerx ;D
Si hay algo muy ochentero es el radiocassette extraible. Al menos en España. Su curiosidad es que la virtud del jodido radiocassette era a la vez su defecto ¿Qué por qué? Simple, la gente se lo llevaba a todas partes. Con la excusa de "Es que si lo dejo en el coche, me lo roban" el aparatito les acompañaba hasta a cagar. Bromas a parte, lo peor de los radiocassettes, en general, es que decidan secuestrar a las cintas para siempre para hacer sonar la misma canción eternamente. No sé si veis Como conocí a vuestra madre, pero para los que la veis, seguro que os acordáis del episodio donde a uno de los personajes se le queda la cinta atrapada en las garras de ese malvado instrumento reproductor ¿Recordáis la canción? I'm Gonna Be (500 Miles) del grupo The Proclaimers es el tercer hit que os recomiendo esta semana. Seguro que muchos la reconocéis nada más escuchar el principio.
Cualquier individuo con una infancia bajo los influjos de la cultura de los 80's debe sonarle familiar el nombre de Bastian. Para los que no lo sepan, Bastian es el nombre del protagonista de la novela La historia interminable de Michael Ende. Seguramente muchos conozcáis el título más por la obra cinematográfica que por el libro. La cinta no agradó demasiado al autor. Decía que habían convertido su obra en una basura comercial demasiado cursi para su gusto. En cualquier caso que te guste más el libro o la película aquí es lo de menos, puesto que lo que interesa es su BSO. Más concretamente una canción de ésta: Never Ending Story de Limahl. Efectivamente, yo, como la mayoría de vosotros, recordaremos el film por algo más que el dragón pedarasta. La canción del cantante al que el vocalista de Elefantes, el grupo español, copiaría el peinado es posiblemente hoy un himno que nos recuerda que una vez fuimos pequeños.
Claro está que hoy no nos podríamos despedir sin hacer mención a uno de los más grandes del Rock, entre otros géneros que se atrevió a tocar. Algunos lo conocen como el rey y señor de todos los goblins, pues si en los 80's quedó algo claro en la cinta de Labyrinth es que era merecedor del título. Además cumplía años. 67 para ser más conceto. Hablamos del gran David Bowie, muy querido por uno de los fundadores de Necromaullido Films, productora amateur de la que hablaremos algún día, y a la que le deseo mucha suerte con el proyecto que están emprendiendo. Esta va por ti Iván LeChat, y por Bowie. Aquí os dejo con Magic Dance, y el fragmento de la película ;-)
La semana que viene más, y espero que mejor. Saludos jodidos de Balcerx ;D
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