Vendámonos al mejor postor: Maldita Nerea a Iberdrola

Las oscuras intenciones del marketing, y su omnipresencia son un hecho irrefutable a día de hoy. A la vista está que vemos publicidad en todos lados. Caminando por la calle, navegando por internet, viendo en la tele, incluso, en las series de televisión. Es más, hay programas de televisión que sirven para lavarle la cara a ciertas empresas que tienen una mala fama ya sea por su trato hacia los trabajadores, o por sus irregularidades de cara al consumidor. Hace unas semanas yo mismo me reía con sarcasmo al ver como el nuevo programa de la Sexta, El Jefe Infiltrado, servía para cambiarle la cara a compañías como Domino Pizza, y así darle una faceta más afectiva y solidaria con sus empleados, más humana. Aunque los que hemos trabajado en esta clase de lugares sabemos lo que hay, y no nos van a engañar. Hay excepciones, pero por lo general, hay que producir beneficios a cualquier coste. Sin embargo, no quisiera desviarme del tema, puesto que estamos hablando de la publicidad y su poder para lavar la imagen.

La publicidad es un instrumento poderosísimo para manejar nuestro pensamiento como si de títeres se tratara. Su función, no la olvidemos nunca, es la de vender, y para vender se vale de las pasiones humanas. De hecho, si analizáis cualquier spot publicitario podéis ver como siempre tratan de darnos a entender que si compramos y utilizamos ese producto conseguiremos esa imagen idílica y perfecta que representa el o la modelo, el o la deportista, la actriz o actor, o el artista músical. Crear deseo donde no lo hay, esa es su misión. Este es el caso del último anuncio de Iberdrola donde jugadores de la selección junto al grupo Maldita Nerea nos pretenden dar entender la buena energía que es su producto, y lo buena que es esa compañía. A pesar de que todos sabemos, no lo es.

No quisiera pasar a entrar a criticar al grupo de Maldita Nerea por su bajeza al prestar su "talento", creando una canción para la compañía. A los jugadores de la selección ya les di en su momento, así que de momento me guardaré los comentarios porque no quiero convertir este humilde escrito en un ensayo de malas artes. Por tanto, allá vamos.

No deja de ser curioso como la canción se adapta cual enchufe a la intención de la compañía, que no es otra, que purgar sus pecados. La estrofa "Soy la luz que nunca te dirá que no, Soy el eco que hoy te envuelve, Tu energía el día en que todo cambió, Y que ya jamás se pierde" es un tributo cinismo más asqueroso del mundo. La luz que nunca te dirá que no, siempre y cuando tengas dinero para pagar el recibo ya que sino te dejamos morir de frío en invierno. Todo un clásico en esta época de crisis. Todavía me hago aspavientos de rabia al oír la jodida estrofa.

Y ¿Qué decir de Maldita Nerea? Pues que la han cagado. Ya me gustaba poco su música, la cual hace uso en algunas de sus canciones de la famosa fórmula 1-5-6-4 de la que hablé en otro post. Pero es que con esto se han acabado de coronar. Ellos saben que son un grupo de bastante éxito. Todavía recuerdo aquel hit de 2010, El Secreto de las Tortugas, que escuché hasta la saciedad porque a algunos se les pegó demasiado. Reconozco que al principio me pareció simpática la canción, pero a la tercera vez, empecé a sentir un sentimiento de repulsión,como el que ahora siento por haber prestado su música y su cara a lavar la imagen a esta empresa.

Iberdrola está dentro de un oligopolio que impone cada años unos precios asfixiantes en un bien tan preciado como la luz, produciendo una pobreza energética que se ha llevado alrededor de 7000 vidas este invierno. Que además lo hace innecesariamente y así parecía afirmarse en el programa de Salvados, de Jordi Evolé, y que además lo hace por engrosar todavía más los beneficios que ya tenía.

No pretendo tener una pureza moral, pero creo que hay límites. Maldita Nerea haciendo lo que ha hecho sólo demuestra una total falta de sensibilidad con la realidad de España, país de donde viene la mayoría de sus seguidores. No estamos hablando de que haya dejado poner una valla publicitaria en sus conciertos. Maldita Nerea se ha puesto al servicio de esta gran compañía, prestando su imagen y lo que ellos venden, su música, por dinero. Si tuvieran algo de sensibilidad y ética jamás habrían aceptado semejante pacto. Pero hablamos de un grupo de éxito, de esos que forra carpetas de adolescentes que suelen ignorar la problemática de nuestro páis, de esos que no dudan en prostituir su música usando fórmulas de demostrados éxitos. Ellos ya perdieron los principios, si es que alguna vez los tuvieron.

Es preocupante ver como día a día ocurren estas cosas. Porque los artistas o intérpretes son figuras que marcan tendencias, que crean patrones de conductas que si bien no todos seguimos, si hay gran parte de la población que siguen. Por ello, hoy algunos seguidores de Maldita Nerea, no creo que todos, creerán que Iberdrola es una compañía de puta madre.

Saludos jodidos de Balcerx